OLFATO SÓLO OLFATO

OLFATO SÓLO OLFATO

Hace tiempo que conozco la falta de pertenencia que tenemos los argentinos. Y no me vengan con eso que no tengo que generalizar, porque esa (la no generalización) es una burda manera de profesar la hipocresía, cosa que tenemos arraigada desde muchos, pero muchos años y sólo sirve para esquivarle el bulto a una realidad que nos está llevando a nuestra propia destrucción como sociedad.

A nadie le importa una mierda la patria. Los argentinos no tenemos patria, en todo caso la única patria que conocemos es la que empieza en el umbral de nuestra casa y termina en la medianera del fondo. Pero patria, lo que se dice patria, no tenemos.

La Patria se hace para afuera del umbral, entregando sacrificio fuera del interés puramente personal. La patria… la verdadera patria, comienza en la vereda, en la calle, en esa que pareciera que no es de nadie porque no la sentimos nuestra. Ahí… está la patria mis queridos coterráneos.

Cuando digo calle… digo todo, campos, ríos, cerros, escuelas hospitales, plazas, todo aquello que nos pertenece y de lo cual no poseemos una escritura a nuestro nombre y que sin embargo, ES NUESTRA, tan nuestra como las miserias que no queremos ver en los que sufren hambre, desamparo y falta de oportunidad a lo largo y ancho del territorio argentino.

Hace tiempo que a puro olfato, vengo viendo como se destruye la familia con campañas solapadas en la venta de alcohol para los jóvenes, el incumplimiento de horarios en los cierres de los boliches para que al otro día esos pibes sean una especie de cadáveres vivientes, incapaces de integrar la mesa familiar de los domingos. Único momento donde padres hijos y abuelos pueden compartir durante la semana, teniendo en cuenta el ritmo vertiginoso en que se vive hoy.

El desprestigio de los poderes del estado y las instituciones viene en aumento.
Hemos llegado a un punto donde no creemos en nada y en nadie.
Me causa gracia oír a los delincuentes decir, “creo en la justicia”.
Ni los inocentes creemos en la justicia, pero… también lo decimos… ¡Que hipocresía!

Sólo por olfato, siento que estamos cada vez más desamparados, los gendarmes están en la panamericana y por nuestras fronteras pasan justos y pecadores. Muchas veces más pecadores que justos. Y suponiendo que fuese al revés, en semejante descontrol los justos en poco tiempo están más expuestos a ser pecadores que los pecadores a ser justos. Sin embargo, esto no lo debería decir porque me van a tildar de facho lo que a esta altura de mi vida me importa un carajo.

El tema es largo, yo sigo olfateando y me pregunto ¿a quien le interesa que nos vaya para la mierda como república?
¿Al laburante, al padre de familia? No, a ese seguro que no.
¿Al empresario argentino que invierte su dinero en el país? No, a ese tampoco.
¿Al poder político? Ahí me quedo pensando.
¿Cuanto mejoramos desde que somos libres de votar?
¿Mejoramos la educación?
¿Mejoramos la salud?
¿Mejoramos la justicia?

Mejoremos como argentinos porque… nos vamos a la mierda.
Con droga o sin droga, si no nos ponemos este país al hombro
sintiéndolo como propio, estamos jodidos.

El primer párrafo es universal. Con esto de que no se puede generalizar se esconde el no hagamos nada. No todos los drogos son ladrones, no todos los barrabravas son violentos, no todos lo policías son corruptos, etc. De acuerdo, pero ¿quién va a hacer algo contra los que sí lo son? Los españoles tienen un refrán que me encanta: "¡somos todos muy honrados pero la vaca no aparece!".

Una reflexión personal, bien escrita; que se hace entender.
(Será tan difícil como que cada uno se haga cargo [sinceramente y con acción más que con palabras] de que la/s responsabilidad/es que le toca?)

VES QUE HABRIA QUE DEJAR QUE SE AHOGUEN UNOS CUANTOS...

ME ACORDE DE UNA CANCION :

Mirás los jubilados
que ya no pueden más,
sin entender reunidos
lo que les pasará.

Y ves los pensionistas,
fantasmas sin hogar,
seguidos del invierno
mirando sin mirar...
Mirando sin mirar.

La patria, te dijeron,
y te dijeron mal,
la patria la de Artigas
la tendremos que hallar.

La tendremos que hallar,
por más que se nos vuelva
aguja en un pajar.

ACOTO ALGO PORQUE SINO RICARDO NO VA A ENTENDER,CUANDO DIGO QUE DEJARIA QUE SE AHOGUEN ALGUNOS ES POR EL TEMA QUE ABRI EN DEBATES SOBRE SI SALVARIAMOS A ALGUNOS O NO.

Una gran reflexión que comparto plenamente. El asunto es, a estas alturas, quien le pone el cascabel al gato...??? Un fuerte abrazo,
Jose

Una realidad que nos esta dejando sin margen de acción,dificil ver la salida.Una sociedad que describe Ricardo que no es privativa de Argentina,sino que parece un mal endémico ya,y no aparecen antibióticos con que combatirlo.

Mejoremos como argentinos porque… nos vamos a la mierda.
Con droga o sin droga, si no nos ponemos este país al hombro
sintiéndolo como propio, estamos jodidos.


Mejoremos como personas, quizás logremos que algún lugarcito de este planeta sea un poco más digno.

Que las hadas te acompañen

Buen texto. Buenas reflexiones.

Saludos.