Claridad Amarga

Seguira así, Alicia no hablara aunque le pregunte, no quiere comprometerse,
Es natural la estoy conociendo cuando se ha reducido a su ultimo rincón, donde las palabras mueren, o quizá se inicie uno en otro lenguaje oscuro y lento, como la música que debe tener el mar en el fondo, una música sin respiración, espesa, agitada en la lentitud de lo largo, con violencias de peso sobre los oídos corriendo en redondas y pegajosas notas,
Que pensara ahora Alicia, si uno supiera lo que tiene detras de sus ojos claros, cualquiera piensa que los ojos claros solo pueden esconder pensamientos llenos de luz, diáfano y tranquilos, y eso podría creer si la transparencia de los ojos, fueran igual a la textura de la piel y de las manos,
Las manos de Alicia son posesivas, y de una posesión atormentada, cuando me tocaba o tocaba alguna de mis cosas sentía el temor de perderlas, se apoderaba de ellas lentamente, las resobaba, las devolvía cansadas, ajenas, un poco menos de uno,
Quizá la claridad sea una forma permanente de apoderarse de las cosas, esa manera de dibujar, de transportar a su mundo lo que también es de uno, con la luz la propiedad se define como una geometría de alambradas, y el egoísmo y la apropiación indebida tienen mas fácil curso,
Las noches son mi campo de acción, ahora recuerdo, nunca vi que a Alicia le gustara la noche, se sentía demasiado diáfana, para jugar con el tiempo, y gozar de esa delicia de prolongar las horas con el paso de la oscuridad, es extraño uno siente que las diez son mas oscuras que las nueve, lo mismo las once y las doce, cada hora mas negra conforme avanza la noche, cada vez mas espeso el misterio de prolongar el tiempo envuelto en lo oscuro, cada vez mas oscuro,
Alicia se hubiera disfrazado para andar en la noche, su hora preferida era el atardecer, después desaparecía, esta noche no podrá esconderse ni desaparecer, ya no tiene salida, puedo pensar que esta disfrazada, o simplemente jugando con su figura, para encontrar todos sus misterios, la noche es como una caldera a punto de estallar, embriaga en su hervor porque hierve como el fruto a punto de fermentarse, es el calor de la transformación, que tan fácilmente enseña el fuego en su clara imagen de llamas, el fuego que algunos esconden y se manifiesta en otras formas menos evidentes, bañados de hipocresía, Siul Emiaj era un muchacho incendiado por eso incendiaba, cerca de el sentí el fuego en mi cara, lo sentía con su llama de amarillo rojo,
Alicia no podía llegar hasta esas sensaciones, sus ojos claros se hubieran achicado, su piel se hubiera deshecho en escamas de frescas quemaduras, fue mi pareja la conozco y la ame, pero tuve miedo de su posesión sin aire, de que se acercara demasiado y ya nunca mas pudiera ser yo mismo, me haría perder a Siul Emiaj, lo empezaría a ver desde sus ojos, notaría sus defectos, y su pequeño mundo asfixiante perdería el sentido místico que ha tenido de referencia a la creación.
Somos Dioses desterrados, y nos vamos creando en dimensiones largas de sueños, para confundirnos frente a las paredes, y caminar siempre mas alla de las palabras.
Alicia es un Dios desterrado en la amargura.
Descubri tarde, que la claridad de sus ojos es amarga.

Muy linda historia, muy buen uso del lenguaje y una secuencia ordenada y clara. Me gustó. Gracias por compartir.
Nilda

Hola preciosa, somos Dioses desterrados, que caminamos siempre mas allá de las palabras, nos gusta confundirnos, ja ja ja no me hagas mucho caso te vas a ir acostumbrando a mis divagaciones, algunas veces mas largas que una noche de insomnio, gracias por tus siempre amables comentarios, recibe un abrazoy un beso de este loco.

Gracias por seguir pasando por mis letras, celebro que sea de tu agrado mi escrito, recibe un abrazo y un beso de este loco

Así está bien, se disfruta. Pero queda liviano ante la falta de una historia a seguir: la acción. El lector es chusma, quiere saber más. Atar esas imágenes, esos sentimientos, a un devenir físico -la acción de los hechos- que le permita participar más: comparar, compararse, sacar conclusiones.
Es sólo mi opinión.

Compañero creo que su comentario es de lo mas acertado, pero creo que no voy a poder darles gusto en eso, para mi lo bonito de un escrito, es que te deje con el delicioso sabor de quiero un poco mas, por otro lado si quieren saber mas, les recomiendo que lean la triste historia de Siul Emiaj y Bertha Alicia, la cual consta hasta ahora de seis capítulos y esta aquí mismo en el foro de obras de teatro, Novelas y textos en capítulos, recibe un abrazo de Oso de este loco