El beso. (Evangelio segun Caye) parte 4

Jesús miraba por la ventana. Le gustaba perderse en el infinito. Solo allí podía sentirse complacido. En su cabeza miles de imágenes revoloteaban. Le dolía el dolor de sus queridos hermanos, le dolía mucho ver como no eran capaces aun de descubrir su grandeza. Le dolía tener que dejarse destruir por ellos, para surgir de nuevo a la vida, portando la esperanza para el futuro.
Sabía que todo era necesario. Sabía que dadas las circunstancias no había elección. Pese a que le hubiera gustado que todo lo que venía no fuera necesario. El ya veía la luz en cada ser humano, si por su voluntad fuera, no haría falta pulir el carbono para sacar el brillo de los diamantes. Pero también era consciente de que todo aquel sufrimiento que les esperaba era necesario para pulir las conciencias de los hombres y que saliera toda la luz de la que estaban hechos. Así se lo comunicaban los hermanos de la Luz. Los compañeros de la hermandad blanca que venían de tanto en tanto a instruirlo y nutrirlo de todas las bendiciones necesarias para un Ser que albergaba una misión de semejante envergadura.

Ahora todos lo amaban, todos le seguían todos le admiraban y le consideraban. Así que el hecho de que Judas lo pusiera al alcance de Herodes para ser detenido no iba a resultar suficiente. Se había construido en torno a Jesús un ejercito de paz donde las multitudes lo protegerían incluso con sus vidas. Se habría producido una masacre, una guerra sin fin y El no estaba dispuesto a que así sucedieran las cosas. Necesitaba un desencadenante que hiciera cambiar en las mentes de sus numerosos seguidores, aquellos que estaban convencidos de que El era “El Mesias” . Un desencadenante que les hiciera repudiarlo y despreciarlo, para que no se enfrentaran con el poder, sino que lo apoyaran en su condena de muerte.

Poco podía sospechar el bueno e ingenuo de Judas que su sacrificio no era el haberle vendido. Cuando le pidió el Beso, no podía sospechar que era precisamente ese gesto el que desencadenaría todo el giro de la historia. Jesús no quiso que él lo supiera, pues a pesar de su amor y precisamente por ese inmenso amor que le procesaba, no hubiera dejado que sucedieran las cosas de ese modo. Judas estaba convencido de que Jesús saldría victorioso de sus opresores. Estaba convencido de que ahí se demostraría todo el poder de su Maestro. El entregaba su dignidad y su nombre a cambio de ensalzar la figura de su amado. Luego se retiraría a descansar en solitario, completamente olvidado de todos, incluso de Dios. No importaba. Jesús se alzaba por encima de los hombres para demostrar su grandeza.
Pobre Judas, pensó... es mucho mas grande su sacrificio y dolor que incluso el de Maria magdalena, cuando sucumbió a la oscuridad.

“Confío en tí, María, confió en que vas a poder cuidarle cuando yo no esté”. Eso pensaba aún sabiendo que era muy difícil persuadir a Judas en medio de tanto dolor y de tanto remordimiento. Cuando un ser humano siente que lo ha perdido todo, deja incluso que se pierda la esperanza. Pero lejos de lo que después se reflejara en las escrituras, el suicidio no podría destruir la grandeza del Alma ni el destino Glorioso que Judas merecía.

Puede que hicieran falta mas de dos mil años para eso, pero la Eternidad no carece de paciencia. En ese momento Jesús miró hacia donde yo me encontraba y me recorrió un poderoso escalofrío por todo mi cuerpo... ¿Es posible que todo esto no lo esté imaginando?

...Continuará.

Sigue impresionandome este relato Caye, hay una cuota de espiritualidad en cada trazo de la narración que involucra al lector en la historia, yo al menos me sumerjo en la lectura de este Evangelio y lo adopto como una perspectiva coherente, riquisima en fundamento historico y además, el final, empiezas a involucrarte tu, con ese "estare imaginando", dando la impresión, la idea de como llegas a sentir el relato y la espiritualidad de su contenido...excelente Caye...esperare las otras entregas, con muchas ansias...

Besos,

Ignacio

CAYETANAAAAAAAAAAAAAAA!!!:
Tu evangelio me tiene atrapada hasta la médula.
La trama está muy bien elaborada, además de todas las verdades que solo alguien que porta la Luz puede expresarlo de esa forma.
Un beso y me siento en el primer asiento a esperar la próxima escena.
Te ha mirado y ahora queeeeeé..?
Espero.

Aquí me quedo un poco inquieto, con todos los acontecimientos que determinaron el desenlace.
atrapante hasta ahora
saludos
Martín