VIVENCIAS DE MI HIJO JAVIER

JAVIER tenía cinco pollitos y los cuidaba mucho, en la mañana les daba pico y los colocaba en una caja, los sacaba para el patio para que aguantaran un poquito de sol. Su mamá lo convidó para el mercado y él no quería ir, pero hizo caso, allí demoraron mucho. Cuando regresaron salío corriendo para el patio a ver sus pollitos y oh, sorpresa! , se estaban muriendo de llevar tanto sol. Así que apresuradamente, buscó un pote, metió los pollitos ahí y le puso una tapa que tocaba con una piedra para que hiciera bulla, como para despertarlos. La mamá lo vió desesperado, se asombró porque sabía que a su niño le gustaban demasiado todos los animales. Lamentablemente, pasó la tarde muy triste porque se le murieron tres. Su mamá le dijo, no te preocupes, que te compro otros.
Javier aprendió una gran lección, que nunca encerrará los mismos en una caja.

Escrito por Trina De Hidalgo el 05/10/2010



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Gracias, seguidor de mis huellas, un saludo cordial.

TRINA