Calabaza de hallowen

En primer lugar necesitáis una calabaza bien gorda, redondita, rellenita, bonita, brillante.. la mejor que encontréis! Después, un rotulador, un cuchillo (usar sólo con vuestros padres!!), una cuchara.. y un cubo de basura para echar todos los restos y que vuestros padres no se vuelvan locos al ver el desastre! jeje
Para empezar, limpiais bien la calabaza con un trapito sólo un poco húmedo. La secáis, y entonces pintáis la cara con el rotulador: aquí entra en juego vuestra imaginación! Pintad ojos desiguales, nariz triangular, boca con forma de luna con dientes de distintos tamaños… Recordad que tiene que dar miedo!
Después con el cuchillo (y con la supervisión de vuestros padres!) cortáis los ojos, nariz y boca de la calabaza siguiendo los trazos de rotulador que dibujásteis, y con cuidado retiráis los trozos. Quitáis tambien la parte de arriba de la calabaza, y por ahí metéis la cuchara y quitáis poquito a poquito el relleno de la calabaza, hasta que esté vacía.
Y cuidadín con no dejar la cocina o donde quiera que lo hagáis hecho un desastre.. o de lo contrario os las tendréis que ver con unos padres furiosos – mucho más peligrosos que los fantasmas! jejeje…
Y después… Ya está todo el trabajo hecho! Ya sólo queda buscar una velita, encenderla, y meterla dentro de la calabaza! Y tendréis una decoración exclusiva con la que asustar a todo el mundo!
Bueno, espero que os haya gustado nuestro consejo: nos los hemos currado, eh?

Ah pero no desperdicies lo de adentro, que las mamás hagan dulce de calabaza con el interior,de rechupete.
Linda idea amiga, muchos la pondran en practica, otros compraran esas calabazas de plástico que hay por todos lados.

Gracias por esta explicación... y sí que hagan dulce, no tengo ni idea a que sabe la calabaza, pero preparadito bien el dulce debe ser una delicia...

Un beso