CARTA DE AMOR

Mi amada:

Te extraño tanto. Cuando llega la noche tu presencia se agiganta, te pienso y llegas en un poema, en una canción.
Los recuerdos me acosan, nuestros paseos por la orilla del río, el primer beso bajo la sombra del aromo. Era primavera, el sol se desgranaba de luz entre las ramas y nosotros torpemente nos besamos.
¡Éramos tan jóvenes! Apenas dos adolescentes enamorados. Descubrí en tu boca el sabor del amor, tus manos guardaban la suavidad que erizaba mi piel. Vivía para adorarte.
Crecimos y maduramos en deseo y ternura. Juntos descubrimos el placer. Tu cuerpo se hacía agua en mis manos, cuando mi boca lujuriosa te recorría. Fuimos conociendo cada pliegue de nuestros cuerpos, revelándonos en cada gemido, en cada sonrisa cómplice.
No existía para mí otra mujer, sólo tú eras la forma que daba perfil a mi cuerpo.
¡La única!
Una tarde dijiste: Te amo. Creí morir de alegría. No era sólo yo el loco que gritaba sus sentimientos. Te prendías de mi cuello y con desenfado me besaba frente a los compañeros del Normal.
Nos costaba concentrarnos en los estudios, únicamente pensábamos en amarnos, tu padre intentó asustarme con amenazas, no lo logró. Llegaron las prohibiciones, los castigos. Pero nosotros salíamos adelante con la fuerza de nuestros corazones. Eras la luz y yo el espejo que te reflejaba.
Hasta que sucedió aquello; tus padres te encerraron, yo desesperaba por abrazarte.
Por la noche cuando todos dormían me acercaba a tu ventana y como los enamorados del siglo pasado nos besábamos, las marcas de la reja quedaban en nuestra cara.
Nos descubrieron y te llevaron lejos.

No volví a verte. Tu familia hizo silencio. Cuando me cruzaba con tus hermanas apuraban el paso, rápidas como el movimiento de un abanico.
Mi desesperanza me llevó a la depresión, no tenía noticia tuyas, me fui hundiendo en un vacío. La tristeza me abrazaba con su oscuridad, era pesada como una piedra. No pude reponerme a tu perdida, durante un año busqué formas de encontrarte, fue en vano.
¡Así, no quería vivir! ¿Para qué?
La vida se fue de mis venas, mi cuerpo suave y lentamente se convirtió en mármol.
Me fui elevando, atrás quedaron un par de flores cadavéricas y los cirios tiritando.
Hoy soy una brisa, un ánima ambulante que te sigue buscando, me voy deshaciendo en una bruma, busco tu figura y encuentro soledad.
Te encontraré, y ese día la caricia de mis manos, el sabor de mis besos te dirán, que te sigo queriendo. Traspasaré las barreras de la muerte y llegaré a tu lado. Un perfume primaveral te envolverá y volarás con los ojos cerrados hasta mi mundo de celaje y quietud, será como un sueño, pero al regresar tendrás en la boca el sabor de mis besos.

Tuyo desde la eternidad.
Juan Manuel

Uyyyyy.....wowwwww.... por Dios, qué carta de amor!!!
Cuanto amor, cuanto amor!!

Amores como pocos, pues cuando uno de los dos desaparecen
pronto es sustituido por otro...pero este amor es sublime.
Trasciende la muerte misma.
Me encantó María!!

Un besote gigante y como siempre, es un placer leerte, amiga.
Un abrazo.



P.D: te dejé las instrucciones, parece ser que te dieron resultados... o no?
ja, ja!!



*

Gracias Susy.

Me alegra que te haya gustado. Quise darle un estilo diferente a lo que acostumbro a escribir, espero haberlo logrado.

Un beso.

María

¡Hola Azulejos!!

Te mando un cariño y te agradezco tus palabras.

María

Gracias nachito, tus elogios me alegran.
Cuando escribo,lo proyecto con mis mejores intenciones, pero a veces no logro expresar y llegar al lector. Esta vez quedé conforme, era como sentir que lo había logrado.
un beso.
María

Amiga Tequendama, has escrito una de las más bellas cartas de amor que en mi larga vida he leído.
Felicitaciones.

Gracias Jaime, me alegran tus palabras.

María

Una misiva impecable,plena,una carta de amor como hacia tiempo no leía,logras conmover,llegas al lector como si fuera una carta personal.
Un estilo diferente al que nos tienes acostumbrados,pero que lo has trabajado de forma excelente logrando captar al lector.
Te felicito compañera,un placer leerte.

Que las hadas te acompañen

Rina: gracias por tus palabras.

El amor con mayúsculas cruza todas las barreras.
Un beso.
María

Gracias Poesía... respeto mucho tus comentarios, este me ha dejado muy feliz. Gracias.

Maria