ACUARELAS COLONIALES (Novela-- octava entrega)

Escritor activo Cantidad de envíos : 678 Fecha de inscripción : 07/10/2015

ACUARELAS COLONIALES (NOVELA)
..........................................

por Alejandra Correas Vazquez
.........................................

LA CAPILLA
......................

ACUARELA DIEZ

En la Merced vecina y colindante a la nuestra, ubicada a muchas leguas de distancia, adonde el paisaje de pampa cambiaba tomando formas y colores diferentes —de largas praderas y escasas alturas sobre un solitario espacio— en esa extensa longitud casi plana que contenía a la sierra sólo en el marco final (y que pertenecía al tío Silvano, ausente siempre en Arica)... Allí, sobre ese solitario espacio pampeano, se encontraba la Capilla que había tocado en dote a nuestra madre.

No nos atraía su paisaje vacío, su silencio con amenaza de pampa, ni comprendíamos las remembranzas de nuestra madre quien en aquel arisco paisaje identificaba su esencia. Nosotros éramos parte del monte serrano, con su irregularidad, su variedad y su oropel. Niños crecidos en un entorno colorido, con su barroquismo hecho de natura adonde estábamos identificados. Eras mi hermano mayor y yo la pequeña gurisa que seguíate por los senderos de pircas, entre talas espinosos, berros aromáticos y aromos amarillos.

Pero la exótica Capilla como un templo de juguete, producíame la fascinación del torreón en medio del páramo. Esa capilla era en mi infancia, la casa de juegos llena de muñecos, más mágicos, porque eran intocables.

Nuestra madre la abría con una llave áspera e inmensa que aumentaba el misterio. Y a medida que descorríamos las fallebas de las ventanitas sin vidrio, la luz exterior deslizábase como un incendio y su santoral, colgante o apostado en nichos de adobe, cobraba vida y jugaba mentalmente conmigo. Toda una infancia deseé arrullarlos en mis brazos y te pedí que los bajaras para mí... ¡Ante la asombrada oposición de nuestra madre! …Fue lo único que me negaste.

Como juguetes preciosos e inalcanzables pasaron en desfile por nuestros juegos, y cuando éstos concluyeron, admiré a tu lado la espléndida hermosura de las imágenes talladas en los templos Jesuíticos… de Córdoba, Charcas y Potosí. Admirando en ellos el precioso artesonado, pulido e impreso por manos indias. Me conmovieron por su serenidad, su drama o su alegría, como alegorías de un mundo propio en su sentimiento, y latente en estas obras de arte.

Pero nunca olvidé la Capilla de nuestra madre, que como templo de juguete era para mí, más grandiosa en su emoción, más intensa en sus reflejos vivos, más cautivadora en su misterio ...

Porque éramos precisamente, más pequeños nosotros.

....................000000000000.........................


Pese a mi religión evangélica, cada cierto tiempo entraba a la iglesia católica para admirar las obras de arte, para mí sí lo son. A mis compañeros del Liceo los atosigaba con mis naturales preguntas ¿POR QUÉ TAL COSA? que no podían responder y que consultara a nuestro profesor de religión el cura, el curador de almas, ja, hasta esto le preguntaba al Padre Alfredo Salgado, quien me trataba de diablo porque sabía que yo era protestante y hacía preguntas difíciles de responder. Fuimos buenos amigos cuando ya era Detective, se dio cuenta que no soy enemigo de ningún cristiano, sólo ideas diferentes.
A propósito, toda mi vida me ha gustado conversar con los sacerdotes católicos que quedan a mi alcance, comprendían que no soy estúpido como para discutir acerca de religión.

En realidad los católicos no tenían problemas con quienes no éramos de ese credo. Sólo entrábamos a admirar las figuras que les representan personajes de la Iglesia y de los santos posteriores a la Biblia. Considero que debemos respetar la fe de quienes buscamos a Dios desde otro ángulos.

Escritor activo Cantidad de envíos : 678 Fecha de inscripción : 07/10/2015

Los católicos alemanes disgustados con los luteranos que habían destruido el arte de las iglesias, dispusieron al comenzar el siglo XX volver a colocar los santos y los personajes del evangelio dentro de las iglesias alemanes. ¡Ningún artista alemán luterano aceptaba!... Entonces recurrieron a un judío: Barlach... Escultor expresionista alemán. También escritor de teatro. Los Nazis encerraron sus obras de arte en un galpón (junto con todas las otras pinturas expresionistas) que llamaron "Arte Degenerado".... Lo cierto es que lo visitaban todos los turistas.

En Bellas Artes yo tuve que estudiar a Barlach. Hoy sus obras están la mayoría en plazas. Federico de Prusia resolvió completar la catedral de Colonia que estaba inacabada por la persecución a los Templarios. Cuando le preguntaron cómo un rey luterano se ocupaba de un templo católico, él respondió que era una obra de arte alemana y como tal orgullo de su nación.

Alejandra

Por desgracia dentro de los credos hay personas que son fanáticas y no trepidan en destruir, atacar y desprestigiar a quienes no tienen sus mismas creencias.
Desde niño rechacé esas actitudes. Recuerdo, cuando tenía unos 11 años de edad, andaba en un grupo de evangélicos predicando por las calles de la ciudad agrícola de Nacimiento; acertamos a pasar por un templo franciscano y vi a un sacerdote que nos observaba. Uno de mis hermanos en la fe cometió el error de gritarle "valientemente" lo que consideraba pecaminoso; sentí vergüenza y al cura franciscano le hice un saludo con una inclinación de mi cabeza. El sacerdote comprendió y respondió con un saludo similar, había entendido que yo no estaba de acuerdo con la ignorancia de quien lo había ofendido.
Ya lo conté, me agrada conversar con los "curitas", como le decimos a los curas aquí en Chile. Conversamos diferentes tópicos de la vida humana en este planeta, pero NUNCA discutir por diferencias; así fui creciendo en conocimiento, comprensión y relación con toda clase de ideas del Hombre, mis colegas saben que no me ofendo por sus bromas, pues entiendo que saben muy poco acerca de la búsqueda de Dios.
Hasta hace pocos años daba charlas en colegios católicos y protestantes acerca de drogas y delitos sexuales, siendo felicitado por ellos. Después de ver el mal comportamiento en otra clase colegios, me negué a ir donde estos últimos, no hay respeto entre los ateos.

» ACUARELAS COLONIALES (NOVELA- Entrega 24)
» ACUARELAS COLONIALES (NOVELA - Entrega 25)
» ACUARELAS COLONIALES (NOVELA- Entrega 27)
» ACUARELAS COLONIALES (NOVELA- Entrega 28)
» ACUARELAS COLONIALES - (NOVELA- Entrega 29)