No Digas que no Avisé...

Un ladrón entró a una casa con su linterna en la mano. Cuando estaba revisando la cocina y el comedor en busca de platería, escuchó una voz extraña, como de ultratumba, que le decía:

- Dios y Jesús te están mirando!

El ladrón, sobresaltado, apagó la linterna y se quedó inmóvil por unos minutos, sin saber si realmente había escuchado esa voz o si eran sus nervios que lo estaban traicionando.

De pronto, nuevamente escuchó:

- Dios y Jesús te están mirando!

Encendió otra vez su linterna, buscó a su alrededor, y pudo ver a un loro arriba de un palito que le repitió:

- Dios y Jesús te están mirando!

Al ladrón le volvió el alma al cuerpo y, sintiéndose más tranquilo, pero bastante enojado, le dijo al loro:

- Loro estúpido..., de dónde diablos saliste?

- Soy Moisés - Contestó el loro.

- Maldito desgraciado..., jajaja... A quién fue que se le ocurrió ponerte Moisés?

- Al mismo pelotudo que le puso Dios y Jesús a los dos Rottweiler que están detrás tuyo y que ya te avisé tres veces que te estaban mirando...

jajajajajajajajaja bien ahí
saludos

Gracias por tu paso, amigo. Saludos,
José

jajajajajajajajajjajajajajajajajajaja si que me has sacado risa chico!!!
simpre es gusto visitarte

Y para mi es un gusto que me visites, amiga. Un saludo con afecto,
José